La gracia y los ojos bellos

«La gracia y los ojos bellos» es un proyecto que surge de la colaboración con Salix Cantor y está formado por una selección de las piezas que le valieron al compositor sevillano Francisco Guerrero (1528–1599) el sobrenombre de «El Cantor de María». Además de las antífonas y los motetes elegidos, dedicados todos a la Virgen, no podía faltar una selección de villanescas, también marianas, como muestra de la maestría insuperable del compositor a la hora de poner música a la poesía de la época en lengua vernácula.

Alma redemptoris mater   (Antífona mariana, a 4)

Ave Virgo sanctissima   (Antífona mariana, a 5)

Ave regina caelorum   (Antífona mariana, a 4)

Dulcissima Maria   (Motete, a 4)

¡Oh, qué placer!   (Villanesca, a 5)

La  gracia y los ojos bellos   (Villanesca, a 5)

La luz de vuestros ojos   (Villanesca, a 5)

Oh, Virgen, cuando os miro   (Villanesca, a 3)

Esclarecida madre   (Villanesca, a 4)

Virgo prudentissima   (Motete, a 4)

Sancta Maria succurre miseris   (Motete, a 4)

Virgo divino nimium   (Motete, a 5)

Regina caeli   (Antífona mariana, a 8)

Ave Maria   (Motete, a 8)